Un nuevo centro de arte español, diseñado por Piano será un referente

Santander.- El Centro Botín, que se inaugura mañana oficialmente en Santander (norte de España), aspira a ser un referente local y global que enriquezca el mundo del arte y la educación, ubicado en un edificio diseñado por Renzo Piano, que se ha inspirado en la gente y la fuerza del mar.

Con una exposición monográfica del alemán Carsten Höller, que requerirá de la interacción del público y que se presenta como una "experiencia corporal", se inaugurará mañana la programación de un centro que es el primer proyecto de Piano en España.

El Centro Botín, que comenzó a construirse en junio de 2012 con un presupuesto de 80 millones de euros, apuesta por explorar las fronteras entre la educación y el arte y desdibujarlas, por agrandar los "espacios de encuentro" entre la formación y el arte para lograr "mayores innovaciones" y logros, en palabras de su directora ejecutiva, Fátima Sánchez.

Junto a las exposiciones programadas, impulsará actividades formativas y para centros escolares, cursos para universitarios, o sesiones para familias. El eje central de este apartado en la investigación desarrollada en la Fundación Botín y el Centro de Inteligencia Emocional de la Universidad de Yale (EE.UU.).

Todo ello lo hará dentro de un espectacular edificio diseñado por Piano, Premio Pritzker de Arquitectura en 1998, que asegura que le dejaron total libertad desde el principio, lo que le permitió desarrollar una idea arriesgada de líneas curvas.

El edificio se ha construido en voladizo, flotando sobre la lámina de agua, para no entorpecer la vista privilegiada de la bahía santanderina donde se ubica.

Una de las reglas que se autoimpuso el arquitecto italiano fue hacer un edificio amable, que no fuera "arrogante" y que no intimidara.

Para armar y vestir el centro se ha utilizado hormigón, acero y 270.000 metros cuadrados de piezas cerámicas, que buscan jugar con la luz y con el agua.

Renzo Piano pensó en el Centro Botín como cree que debe concebirse toda obra arquitectónica: pensando en las personas.

"Las personas son la fuerza motora de los proyectos. El arquitecto es como el doctor, que se preocupa por la gente", señaló Piano, que defiende que su profesión debe estar "socialmente involucrada".

Y bajo esta filosofía, el edificio recuperó una zona portuaria en el centro de la ciudad para continuar el paseo que corre junto al mar con un edificio que "flota" y que, para Piano, es "como añadir un barco más a la bahía".

La construcción encara el sur para ofrecer la mejor panorámica de la bahía y de la línea de costa en frente. "Está mirando al sol", comentó el arquitecto, que explicó que esa orientación no es la habitual pero suponía la mejor opción para el juego de luz que singulariza esta construcción.

El Centro Botín le gusta porque será un edificio cultural, de uso ciudadano, un punto de encuentro, y porque tiene "dos almas", una dedicada al arte y otra a la educación.

Para su primera obra en España, Piano ha trabajado en el corazón de Santander, pero cree que la arquitectura debe transformar las ciudades, y sobre todo los suburbios y la periferia, donde considera que está ahora el reto.

Precisamente él trabaja en proyectos en zonas periféricas en el norte de Nueva York, para la Universidad de Columbia, y en Saint-Denis (París), para el Palacio de Justicia.

"Hace 40 años el desafío estaba en conservar los centros históricos, pero creo que a veces nos hemos pasado un poco de rosca. A veces entramos en una calle arreglada y parece un centro comercial", afirmó.